Los autores de la publicación no hicieron tales declaraciones. El artículo trata de que pese a las expectativas, el año de guerra de Rusia contra Ucrania no ha sido “momento de transformación para la defensa europea”. Por el contrario, ha mostrado que los países europeos “doblan su dependencia de EEUU y no son capaces de coordinar sus acciones en cuanto a la resolución de profundos problemas estructurales de la defensa europea”.

Los medios de comunicación rusos, así como canales de Telegram prorrusos, aludiendo a una publicación de Foreign Affairs, han difundido información de que Ucrania supuestamente “ha llevado la defensa de los países de la UE a un estado pésimo”.

Captura de pantalla “Ucrania ha llevado la defensa europea a un estado pésimo” – military.pravda.ru

La tesis de que la ayuda militar a Ucrania supuestamente ha debilitado considerablemente o “ha llevado a un estado pésimo” la capacidad de defensa de países europeos es una de las narrativas más populares de la propaganda del Kremlin, con las anunciaciones de la preparación de un contraataque de Ucrania en 2023 como telón de fondo. En esta ocasión, los propagandistas han recurrido al artículo de los columnistas Max Bergmann y Sophia Besch publicada en Foreign Affairs el 7 de febrero de 2023 bajo el título: «¿Por qué la defensa europea aún depende de América?» (en inglés – “Why European Defense Still Depends on America”).

La publicación de Foreign Affairs no menciona en absoluto que Ucrania supuestamente “ha llevado a un estado terrible” la capacidad de defensa de la UE. En realidad, los autores del artículo escriben que la agresión bélica de Rusia contra Ucrania ya ha sacado a luz problemas evidentes de la defensa de los países europeos y que dichos problemas todavía no se han resuelto, incluso, después de un año de guerra.

Entre los problemas urgentes en la capacidad de defensa de la UE, los autores de la publicación destacan la falta de financiación de la industria militar durante los últimos 20 años; falta de preparación del sistema para acciones defensivas en el territorio de la UE; la ausencia de un mercado común de defensa para satisfacer las necesidades de la seguridad europea; descoordinación de los miembros de la UE en cuanto a los objetivos fijados en el ámbito de la defensa; la dependencia de las fuerzas armadas de los países europeos de los EEUU para resolver las principales tareas militares, etc. Los autores de la publicación consideran que pese a la esperanza de que la invasión rusa en Ucrania se convierta en un momento de transformación para la seguridad europea, por desgracia, el último año ha mostrado cómo los países europeos “doblan su dependencia de EEUU y no son capaces de coordinar sus acciones”.

En lugar de activar los esfuerzos en cuanto a la resolución de profundos problemas estructurales de la defensa europea, la guerra no ha hecho más que intensificarlos. Las fuerzas europeas se encuentran en peor estado de lo que se pensaba, y las reservas de armamento se agotan inevitablemente para apoyar a Ucrania. Mientras Europa busca rearmarse, descubre que su industria de defensa no es adecuada para su propósito. Los esfuerzos para coordinar las adquisiciones europeas no están funcionando, ya que todos los países van por caminos separados, lo que se suma a la disfunción general. EEUU ha demostrado su insustituibilidad para la seguridad europea y ha confirmado la dependencia europea de Washington”, dice el artículo.

Es precisamente este fragmento el que se ha convertido en motivo de manipulación. En realidad, la publicación trata de que los países de la UE buscan reponer rápidamente sus arsenales y reemplazar el equipo enviado a Ucrania con sistemas que pueden comprar fácilmente a fabricantes fuera de Europa, principalmente en los EEUU. El resultado final es que todas las FFAA europeas utilizan diferentes equipos, lo que les dificulta mucho más trabajar juntas. Este factor, junto con la falta de financiación de la industria y la falta de coordinación de compras entre los países de la UE, profundiza significativamente la dependencia de la Unión Europea en el ámbito de la defensa de EEUU y la OTAN en su conjunto. Los autores de la publicación creen que «la tendencia de la OTAN a defender su propia fuerza y ​​unidad, por regla general, enmascara la obsolescencia de las fuerzas armadas europeas».

Para terminar, los autores sugieren a los países de la UE no solo incrementar su presupuesto defensivo, coordinar la planificación de la defensa y la integración entre la OTAN y la UE, sino también concentrarse en el lanzamiento de su propia base de industria de defensa que disminuirá la dependencia de los países de la Unión Europea de EEUU. “Hasta que los europeos no empecen a actuar, pensar y gastar colectivamente, el continente nunca superará su excesiva dependencia de Washington”, concluyen los autores de la publicación.

Anteriormente StopFake ha refutado la desinformación de que “La guerra en Ucrania “ha agotado” a Europa, Ben Wallace”.