El 17 de abril, los medios rusos difundieron información falsa sobre una nueva «hazaña» del ejército ruso en Mariúpol. Según los medios rusos, las fuerzas especiales rusas supuestamente «liberaron rehenes turcos del cautiverio ucraniano» en una mezquita en Mariúpol. Sin embargo, el jefe de la Asociación de Mezquitas de Solimán el Magnífico, Ismail Hadzioglu, ha negado las afirmaciones de Rusia de haber «rescatado a ciudadanos turcos del cautiverio ucraniano».

«Las tropas rusas liberaron los rehenes de la mezquita de Mariúpol», ucrania.ru

Los medios propagandísticos rusos también informaron que la «operación especial para salvar a los ciudadanos turcos» se llevó a cabo a solicitud personal del presidente turco, Recep Tayyip Erdoğan, quien pidió a las autoridades rusas «liberar a las personas detenidas por militantes en el edificio de la mezquita».

Se trata de la mezquita de Mariúpol, nombrada según el sultán Solimán el Magnífico y su esposa Roxolana, que durante marzo de 2022 sirvió de refugio de los bombardeos rusos a ciudadanos turcos y musulmanes de otras nacionalidades. El jefe de la Asociación de Mezquitas de Solimán el Magnífico, Ismail Hadzioglu, ha refutado las afirmaciones de que «Rusia rescató a los ciudadanos turcos del cautiverio ucraniano». Según Hadzioglu, no había ni un solo ciudadano turco en la mezquita de Mariúpol el 17 de abril, y no había nadie allí para que «rescaten» a alguién. Hadzioglu también dijo que hay un total de 24 ciudadanos turcos con sus familias en la ciudad, todos los cuales han estado durante más de cuatro semanas detenidos en las áreas de Mariúpol ocupadas por las tropas rusas.

De hecho, todas las personas en Mariúpol, independientemente de su nacionalidad, no pueden abandonar la zona de peligro debido a los constantes bombardeos a la ciudad por parte de los invasores rusos. Rusia no solo está atacando instalaciones militares, sino también bombardeando maternidades, hospitales y teatros: el 90 % de la infraestructura de la ciudad ha sido destruida por las tropas rusas.

En una entrevista con los medios turcos el 18 de abril, el ministro de Defensa Nacional de Turquía, Hulusi Akar, tampoco confirmó la presencia de «ciudadanos turcos capturados por Ucrania» en la mezquita de Mariúpol. Según Akar, el gobierno turco mantiene contactos con ciudadanos que se encuentran bloqueados en la ciudad debido a la agresión rusa. Se enviaron dos aviones turcos a Ucrania para evacuar personas y brindar ayuda humanitaria, y el gobierno turco «continúa la coordinación para que los aviones puedan regresar a Turquía lo antes posible». Hulusi Akar también enfatizó que ningún ciudadano turco está en la mezquita de Mariúpol, pero no hay ningún mérito de los militares rusos en esto. Según el ministro turco, algunas personas abandonaron la ciudad por su cuenta durante evacuaciones anteriores, mientras que otras se trasladaron a refugios más seguros.

Los ocupantes rusos bombardearon la mezquita del sultán Solimán el Magnífico en Mariúpol el 12 de marzo; en el momento del bombardeo había 86 adultos y niños. Nadie fue «capturado» o «retenido por la fuerza»: las familias se escondieron en una mezquita de los ataques aéreos rusos. El bombardeo dejó el edificio intacto, pero un proyectil ruso cayó a 700 metros de la mezquita. El 14 de marzo, Ucrania y sus aliados pudieron evacuar a los civiles: 160 vehículos salieron de la ciudad por el «corredor verde», incluidos dos autobuses con ciudadanos turcos que se habían escondido del bombardeo ruso en la mezquita de Mariúpol.

El 16 de abril, el presidente ucraniano, Volodymyr Zelenskyy, dijo que Rusia estaba violando todos los acuerdos sobre corredores humanitarios desde Mariúpol para civiles y heridos, incluso la mediación del presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, no dio resultados. Los civiles —incluidos los extranjeros, las mujeres, los niños, los enfermos y los heridos— siguen atrapados en la ciudad.

Anteriormente StopFake había desmentido numerosas noticias falsas sobre los acontecimientos en Mariúpol.