El medio argentino Infobae dialogó con la viceministra de Información de Ucrania, Emine Dzheppar, que llegó a Argentina con motivo de la cumbre del G20, en un intento de generar visibilidad sobre la escalada de tensiones en la península de Crimea.

Emine Dzhaparova, viceministra de Información de Ucrania (FeedbackPR)
Emine Dzheppar, viceministra de Información de Ucrania (FeedbackPR)

-¿Cuál es la postura oficial del gobierno de Ucrania sobre el incidente el estrecho de Kerch?

Esto no empezó con la agresión del 25 de noviembre, este caso comenzó en abril en 2018 cuando la Federación Rusa inició un bloqueo de buques comerciales. Así que desde ese momento desde el lado ucraniano, políticos, periodistas e intelectuales, ya estaban tocando las campanas internacionales avisando que esto no era el final. Este bloqueo tiene un propósito y no terminará sólo ahí. Y vemos como consecuencia esta agresión militar contra los tres buques.

-¿Y qué considera que está buscando Rusia con estas acciones?

Siempre que intentamos entender la lógica detrás de las acciones de Rusia, es un desafío. No podemos entender la lógica de invadir Crimea, de la guerra en Donbass o de embestir un pequeño remolcador ucraniano. Y si escuchas los audios de los comandantes rusos [durante el incidente en Kerch], es una incitación a la guerra.

La idea, lo que yo creo, es que esto se trata de un intento de la Federación Rusa de mantener el control sobre Ucrania. Es una actitud ‘low cost’, esto ya no es la URSS, hay una ambición de mantener el imperio pero sin tener los recursos. Por eso eligen ir por los casos congelados, como Moldova, Georgia y Ucrania.

Tenemos esta realidad escondida, con la posición oficial del presidente Putin diciendo que es una provocación del presidente [ucraniano] Petro Poroshenko. Entonces mi pregunta es, ¿por qué entonces provocó la ocupación de 2014? Por qué tenemos al ejército ruso ahí, ¿no es la provocación más grande? Lo más cínico de esta situación es que tenemos una brutal violación de la ley internacional en 2014 y cinco años después seguimos buscando la responsabilidad ucraniana.

Y ahora tenemos la ley marcial que se ha firmado y durará un mes.

-Los reportes iniciales hablaban de un pedido de extenderla por 60 días, ¿es cierto?

Se suponía que fueran 60 días, pero debido a que sectores del parlamento están preocupados por las elecciones presidenciales se decidió tenerla sólo por 30 días.

-¿Pero puede ser renovado al término del período?

No lo sabemos, dependerá de la situación. Por ahora, teniendo en cuenta la situación actual, no creemos que sea necesario porque todos queremos tener estas elecciones presidenciales y parlamentarias.

Pero todo el mundo sabe que Rusia intenta interferir en las elecciones, obviamente harán todo lo posible para lograrlo. Para Putin, Poroshenko es el enemigo porque persigue el interés nacional. Él es el símbolo de la resistencia, y harán todo para desacreditarlo.

-¿Existe entonces un peligro de que no se realicen las elecciones, sin embargo?

Yo no diría eso. No podemos ser profetas y no podemos predecir el futuro. En mi posición oficial no puedo dar mi opinión personal, por lo que debo ser precisa. Ahora, teniendo en consideración la situación actual, no hay peligro. Aún con la ley marcial, el texto mismo permite establecer limitaciones geográficas a su aplicación. Sólo se aplicará en 10 regiones en la frontera con la Federación Rusa.

Esto no limitará la cobertura de los medios ucranianos o internacionales en esas regiones. Nada cambiará en ese sentido, en la situación actual. No sabemos qué pasará mañana. ¿Qué ocurrirá si Rusia intenta apropiarse de Mariupol [puerto sobre el Mar Azov]? Todos nuestros expertos dicen que este bloqueo que empezó en abril, que tuvo como consecuencia esta agresión militar que se saldó con tres buques y 24 marinos ucranianos secuestrados, fue el primer paso, y para completar en este cuadro habrá un intento de crear un corredor terrestre entre Donbass y Crimea. No excluyo esta posibilidad, si ya ocuparon una parte del territorio nada los detiene para ocupar otra.

La ciudad de Mariupol es estratégica, es esta conexión terrestre que buscan, así que no excluimos que intenten conectar ambos territorios ucranianos conectados.

-¿Qué implica la ley marcial en el corto plazo en estos territorios, habrá movilización de tropas?

Podría ser. Por ahora, esta es la primera vez en la historia de Ucrania en la que se decreta la ley marcial, nunca lo probamos, ni siquiera en 2014. Creo que, si me preguntas, aquello fue un problema de liderazgo, porque no teníamos ejército ni líderes preparados para tomar la responsabilidad.

Hoy se trata de proveer los mecanismos legítimos para una reacción más ágil, consolidando a la población frente a posibles agresiones, porque no sabemos qué pueda pasar mañana.

-¿Para lograr contener una agresión hipotética rusa, deberán tener el apoyo de la OTAN?

Vamos a tener ese apoyo. El presidente Poroshenko acaba de pedir al presidente Recep Erdogan que hable durante la cumbre del G20 sobre el caso de Ucrania con el presidente Putin. Hasta donde sé, Erdogan también llamó por teléfono al presidente Trump y decidieron mantener una reunión durante el G20 para discutir este tema. Así que sé que la cuestión será elevada en la cumbre.

Por supuesto, si me preguntas a mí, Ucrania y Rusia están en diferentes categorías de peso, como si habláramos de boxeo. Y por supuesto Ucrania no es tan poderosa, porque Rusia es una potencia nuclear, un miembro permanente del Consejo de Seguridad, Rusia es una economía del G20. Nosotros no tenemos tantos recursos, y mucho se va a parar a la guerra en curso.

Por tal razón en nuestro caso esperamos que el apoyo internacional sea más poderoso, y estamos agradecidos porque hasta el momento ha sido sólido, como con la resolución de 2014 en la que más de 100 países apoyaron la integridad territorial de Ucrania, declarando claramente que Crimea pertenece a Ucrania.

La razón por la que estoy aquí es para intentar ser una voz, porque no tenemos tanto dinero como para lanzar un Russia Today, un Sputnik, un Interfax, ni miles de personas pagadas por el estado con el propósito de escribir mentiras. Recuerda el caso de Skripal, cuando identificaron a los dos agentes de GRU y Putin dijo»son sólo dos turistas».

Lo que creemos que puede hacerse es que buques de la OTAN entren en el Mar Negro, creo que esto funcionaría para controlar, porque desafortunadamente lo que vemos es que la vía diplomática a veces no funciona. Así que un estado policial como Rusia sólo entiende el lenguaje de poder. Creo que se trata de ser más activos a la hora de buscar formas de aumentar la presión.

Esto no es un asunto sólo de Ucrania. Por supuesto nosotros estamos en el frente, nuestra gente está muriendo y somos la parte más interesada, pero esto no es sólo la responsabilidad de Ucrania.

-¿Pero la llegada de buques de la OTAN al Mar Negro no tiene el riesgo de escalar el conflicto?

No creo, pero podría ser interpretado así por Rusia. Ellos cometen crímenes y tratan de poner la responsabilidad de esos crímenes en otros. Pero como decía, a veces no es sólo cuestión de diplomacia sino de mostrar que hay una habilidad para reaccionar. Por eso tener buques de la OTAN en el Mar Negro no significa que vayan usarse, pero es una forma de mostrar una línea roja que no debe cruzarse, porque Rusia las ha estado cruzando desde 2014.

-¿Y operarían desde puertos ucranianos?

No lo sabemos, es tan sólo una idea articulada por el liderazgo ucraniano, y yo personalmente apoyo esa idea. Lo que sí esperamos es que la cumbre del G20 sea la plataforma en la que podamos, al menos, discutir el caso de Ucrania y esperamos que sean liberados los 24 marineros. Tenemos un tratado de 2003 que establece que el estrecho de Kerch es un territorio marítimo común a Rusia y Ucrania, y ha sido violado.

Fuente: Infobae