No solamente Facebook y Twitter están entre las redes sociales que pueden ser utilizadas para las manipulaciones mediáticas, también pueden caer como víctimas de la desinformación los usuarios de Instagram, el servicio de foto-blogging. En diciembre pasado, la compañía New Knowledge, junto con la Universidad Columbia y el Comité del Senado de EE.UU., publicaron resultados de una investigación que revela la participación de la famosa Agencia de Investigaciones de Internet (‘fábrica de trolls rusos’) en las campañas desinformativas en Instagram durante la campaña electoral de los Estados Unidos en 2016. Aunque la popularidad, el alcance de las publicaciones y la reacción de los usuarios son mucho mayores que los de las publicaciones más controvertidas en Facebook, en Instagram la ‘fábrica de troles’ intentaba persuadir a los votantes afroamericanos para que no voten, ya que su voto, supuestamente, no cambiaría nada.

Las actividades de los trolls rusos en Instagram

Según el director del Centro de Periodismo Digital de la Universidad Columbia, Jonathan Albright, Instagram se ha convertido en la fábrica perfecta para crear memes visuales. La Agencia de Investigaciones de Internet rusa logró crear una gran cantidad de cuentas, algunas de las cuales se volvieron muy populares y luego fueron utilizadas para publicar imágenes y afirmaciones manipuladoras. Por el carácter de la plataforma, no se trataba de notas largas, sino de cortas frases sobre unas imágenes, que atraían comentarios y reacciones de los usuarios.

La audiencia objetiva para tales cuentas eran los usuarios afroamericanos, donde levantaban temas culturales de este grupo de la sociedad estadounidense. Además, muchas publicaciones estaban claramente dirigidas contra Hillary Clinton, también había publicaciones sobre el derecho a poseer armas, los problemas de vida de los veteranos en la sociedad estadounidense. Muchas imágenes estaban dedicadas a la brutalidad policial; también había relacionadas con el tema de la religión. Los autores del informe analizaron las ideas de las publicaciones de Instagram y concluyeron que eran los temas interraciales en boga durante los últimos meses antes de las elecciones presidenciales americanas de 2016.

El ejército de Instagram en cifras

Las 10 cuentas más populares fueron capaces de obtener más de 120 millones de interacciones con publicaciones de las páginas. Cada cuenta estaba dirigida a un público específico. El 40% de las cuentas creadas por la ‘fábrica de trolls’ rusa tenían al menos 10 mil suscriptores. Tales cuentas se consideraban de micro influencia. Además, hubo más de una docena, entre las cuentas de Instagram más populares, que tenían más de 100 mil seguidores. A esos los investigadores los calificaron como ‘influencer’. Con tantos seguidores pueden impactar la opinión de su audiencia.

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Aquí está una lista de algunas de las cuentas más populares al momento de escribir este informe:

@blackstagram__ — 300 mil seguidores

@american.veterans – 215 mil seguidores

@sincerely_black_ — 196 mil seguidores

@feminism_tag – 126 mil seguidores

@rainbow_nation_us – 156 mil seguidores

@_american.made – 135 mil seguidores

@afrokingdom_ — 150 mil seguidores

@army_of_jesus – 74 mil seguidores

@mericanfury – 87 mil seguidores

@pray4police – 127 mil seguidores

Todas esas cuentas están bloqueadas en el momento.

A partir de 2015, todas las cuentas en Instagram creadas por la ‘fábrica de trolls’ rusa difundió 116 mil publicaciones, lo que supera casi en doble la cantidad de publicaciones en Facebook hechas por ellos mismos.

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Al mismo tiempo, las publicaciones de Instagram recibieron más de 180 millones de “corazones” y 4 millones de comentarios entre 20 millones de usuarios. Las publicaciones de Instagram recibieron seis veces más «me gusta» que las de Facebook.

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El informe también compara estos datos con las actividades de los trolls rusos en Twitter, allí empezaron sus campañas en 2013. En Twitter llegaron a 1,4 millones de usuarios con 73 millones de reacciones (retuits y corazones) en total.

Además, desde las cuentas de la misma ‘fábrica’ subieron más de mil videos a YouTube.

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Para el apoyo de esas cuentas en las redes sociales, la Agencia de Investigaciones en Internet ha registrado una gran cantidad de nombres de dominio destinados a publicar contenido manipulador. Algunos de estos sitios web siguen funcionando, otros están a la venta. Más de la mitad de ellos estaban destinados específicamente para la audiencia afroamericana.

Con consentimiento tácito

La mayoría de las cuentas y muchas páginas web no están disponibles actualmente. Sin embargo, los autores del informe enfatizan que, incluso en mayo pasado, las cuentas administradas por la Agencia de Investigaciones en Internet no solo funcionaban, sino que también se dedicaban a un trabajo activo. Según un informe de Oxford-Graphika, la actividad de Instagram ha aumentado un 238% en los seis meses posteriores a las elecciones presidenciales estadounidenses.

La única mención del problema sobre las cuentas manipuladoras y gestionadas por rusos en Instagram se encuentra en el blog de la compañía, en el que Facebook mencionó que, de más de 3 mil anuncios, solo el 5% aparecieron en Instagram. Costaron un poco más de $ 6,7 mil.

En respuestas por escrito al Congreso, en octubre, en relación a la pregunta de si considera Facebook que algún contenido creado por la Agencia de Investigación en Internet rusa desalentó a las personas a votar, los representantes de Facebook respondieron: «Consideramos esto una afirmación que solo se puede realizar después de una investigación, cuyos participantes tengan acceso a información secreta e información de todas las compañías e industrias relevantes”.

Manipulaciones en Instagram: nuevos desafíos junto con la moda

No sorprende el hecho de elegir Instagram como el objetivo para difusión de manipulaciones. El Pew Internet Research ha calculado que los estadounidenses de entre 18 y 29 años prefieren Instagram a otras redes sociales. Además, es una red social popular entre los afroamericanos. Los jóvenes pasan mucho tiempo en Instagram, así como en YouTube, y consideran Facebook como una red social de sus padres.

Con Instagram aún no es tan fácil usar todos los métodos de verificación disponibles en otras redes sociales o en Internet en general. Además, lo que se difunde por Instagram no son falacias puras, sino manipulaciones o imágenes humorísticas.

Los autores del informe de New Knowledge, en la parte final, enfatizan que, en los últimos cinco años, la desinformación ha pasado de ser una molestia a una guerra de información con grandes apuestas.

“Estamos hablando de si los robots tienen derecho a la libertad de expresión, respetamos la privacidad de las personas que no existen en realidad teniendo sus perfiles falsos y llevamos a cabo audiencias en el Congreso para discutir si los usuarios de YouTube han sido injustamente castigados. Es nuestro compromiso con los principios democráticos lo que nos coloca en desventaja frente a un adversario que censura y manipula con entusiasmo a nuestros ciudadanos», resume el informe.

Por Nadia Balovsiak, para Stopfake.org.